Trauma Sexual: Incesto y Abuso Sexual a niñ@s

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La Inocencia transgredida y el corazón roto.

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Podemos dar LUZ a la oscuridad. Reflexionando acerca de cómo transmitir Calma, Esperanza, y sobre todo mi Presencia Amorosa. 

Para comunicar acerca de experiencias de trauma sexual, incesto y abuso sexual, vino a mi una imagen: mis padres, mis abuelos y sus contextos. Venían de la pobreza material, esa que, a veces, atrapa el alma y no permite desarrollar la consciencia y abrazar el amor. Solo viven en la confusión, tensión, ansiedad e incluso locura.

El incesto, es un hecho traumático para quien fue víctima. Vivirá mucha confusión, miedo, vergüenza, culpa, rabia y un estado de ansiedad permanente.

La niña o niño que recibió ese golpe a su inocencia se ve atrapad@ en un vínculo trastocado que, si no se mira con coraje y conciencia, teñirá gran parte de su vida de dolor y confusión.

Si esto te ocurrió, parte de la vida vas a transitar portando dentro tuyo la desconexión con el ambiente, con la raza humana y contigo mism@ y tendrás una experiencia  silenciosa de perturbación y devastación interior permanente.

Estas heridas son tan profundas que pueden parecer irreparables. En mis cuarenta años de terapeuta, buscadora incansable de herramientas para reparar los corazones heridos, hoy puedo decirte que esa herida puede repararse.

¿Cómo reparar un corazón herido?

Existe una canción que habla de cómo repararlo, habla de que hay hechos que SON, habla de pedir ayuda y de seguir en la vida. Todo lo que ocurrió allá atrás, ¡YA PASÓ! Y sobreviviste a esa herida.

Mira a tu alrededor, mira dónde estás AHORA, mira a los que te acompañan, mira cómo lograste salir de esa experiencia, los recursos que usaste, la fuerza que tuviste y, sobre todo, mira tu corazón que, a pesar del horror vivido, aún está VIVO y AMA.

Lo que viviste fue una trasgresión a tu Inocencia y dejó heridas en tu corazón. Sí y puedes repararlo HOY.

Todos los traumas sexuales son sobre violación, sobre la violación en forma de intrusión en nuestros espacios internos más profundos, sagrados y personales.

Hay diferentes tipos y niveles de trauma sexual y hay una gran diferencia entre los vividos en la infancia y en la adultez. En los primeros, el trauma es más profundo porque está la traición y el apego confuso. He observado en la consulta que hay una variedad de síntomas asociados a traumas sexuales, aquí señalaré algunos.

– Somatizaciones, síntomas físicos y enfermedades psicosomáticas.

– Discapacidad en la regulación de las emociones, desde sentirse sobrepasad@ con las emociones hasta no sentir nada, estar apagad@.

– Relaciones distorsionadas con otras personas, dificultades en crear y mantener vínculos afectivos a nivel físico/sexual y emocional.

– Abuso de drogas, alcohol, exceso de trabajo y promiscuidad sexual.

– Desordenes alimenticios.

– Autoflagelación-

-La pérdida de una creencia o Fe en la bondad de la gente o en algo superior.

Todos los seres humanos nacemos en un sistema familiar y los eventos traumáticos  sexuales ocurren en este sistema. Nada ocurre en el aire. Estas experiencias son también síntomas del sistema, ya que están insertas en una familia, ocurriendo en ella a través de sus miembros. Estos hechos muestran que este sistema se encuentra profundamente Perturbado y presenta un gran desorden y distorsión.

Así como experimentamos una gran desregulación de nuestro sistema nervioso cuando somos impactados por un evento muy fuerte, intenso, repentino y temprano, la familia como sistema, también está expuesta a eventos traumáticos que impactan a todos los miembros. Por ejemplo, la pobreza, la guerra, dictaduras, asesinatos o transgresiones de los límites generan en el sistema un estado de shock, desconexión y fuertes disociaciones. En algunos miembros de la familia, estos síntomas son también traspasados de generación en generación.

Sanarte a ti mism@, HOY, es sanar a las futuras generaciones de tu familia, que te miran con ojos anhelantes para que des el salto a mirar lo que pasó y a encontrar dentro de ti la oscura semilla alojada por el victimario en tu herido corazón.

Salirse de la dinámica de Víctima/perpetrador/salvador, es el primer paso.

¿Cómo?

Sí, tuviste una experiencia de incesto y abuso sexual, pero HOY ya no está.

Sanarse de las heridas del trauma HOY, está en tus manos.

Lo que sí está hoy, es una profunda desregulación en tu cuerpo, en tu sistema nervioso, que puedes observar en la ansiedad, agitación, excitación corporal que llevas todos los días. También puedes observarlo en tus estados depresivos, angustiosos, crisis de pánico, bajones, timidez, miedo y vergüenza excesiva.

Todos estos síntomas están en el cuerpo. La causa es un exceso de voltaje/energía que se activó cuando sufriste la violación de tus límites físicos, emocionales, espirituales. Este voltaje, toca tu puerta porque quiere salir y ser DESCARGADO. Estos síntomas son un llamado de tu alma para que retornes a ti.

El perpetrador ya no está, dejó la semilla del mal dentro de ti. Seguir mirándolo es seguir regando y aumentando ese voltaje interno, vuelves a re-traumatizarte.

Gracias a las Constelaciones Familiares, una parte de la sanación es posible. Le devolvemos al perpetrador padre/abuel@/ti@ SU MALDAD y eso alivia mucho porque se recupera la inocencia y la semilla de la maldad es devuelta a su lugar.

Al comprender que el sistema familiar estaba en trauma y desequilibrio, la niña o niño quisieron equilibrar ese sistema desde el amor ciego, ayudando a la mamá o a la abuela por lo que ellas no hacían. El inconsciente familiar tomó a la niña o niño y los puso en un lugar que no les correspondía. Es muy difícil de comprender, pero sí ayuda el ver cómo esos padres (madre y padre) estaban profundamente perturbados, disociados y eran también víctimas de sus infancias difíciles, donde la pobreza física y espiritual era el contexto y ellos no pudieron liberarse de ese mal.

Ver al alma del padre y de la madre, ver a su niña o niño clamando amor, ver cómo la inconsciencia del mal los tomó y se generó en ellos tanta perturbación, ayuda a dejarlos atrás con lágrimas compasivas.

«No pudieron y dejo con ustedes su maldad, su perturbación, su culpa. Me libero de todo eso y avanzo en la vida. Rescato a mi niña, niño herid@ porque AHORA yo puedo cuidarl@. Uds me pasaron la vida y la tomo al precio que me la pasaron y HOY me hago cargo de ella también. Ahora me manteng@ lejos de uds todo lo que yo necesito. Lo que ocurrió en nuestra familia es IMPERDONABLE y dejo esa culpa con ustedes.”

Rescatar a la niña o niño herido es el gran paso a la sanación. Ayudar al cuerpo a descargar el voltaje de trauma, es concretizar darle a esa niña o niño un contenedor/ cuerpo amoroso, compasivo, que no tuvo y que HOY sí puede tener.

Así todo lo que pasó, YA PASÓ.

Una vez que se toma a la niña o niño y el cuerpo se sana y autorregula, el corazón es zurcido con hilos de plata y oro llenos de amor. De esta forma se hace posible que el alma y el corazón se miren y exista un abrazo de profunda comprensión acerca del ser humano y, desde allí, emergen brotes de compasión, alegría, esperanza, paz y una dulzura de lluvias cristalinas que inundarán todo el cuerpo, la mente y  el corazón. Esto podrás compartirlo con todos los que te rodean.

Hoy eres Más Grande. 

Agradezco ser un canal para entregar estos conocimientos y ayudar a que nos sanemos unos a otros.

¿Qué ayuda?

– Terapia Neural  (Clinica Intersomos)

– Osteopatía  (Clínica Intersomos)

– Constelaciones Familiares.

-Terapia Somatic Experiencing.

– Yoga terapeútica

– Neuro-feedback

– Arte terapia

– Meditación, mindfulness

Vilma Bustos.

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