Formación

Formación en constelaciones
familiares y resolución de
traumas

Palabras de Bienvenida

Esta Formación es un constante desafío para mí. Es un proceso que está vivo y que tiene todos los ingredientes de conocimiento, experiencias prácticas, encuentros humanos, servicio solidario, y sobre todo, grandes dosis de incertidumbre, sorpresas, cambios, plasticidad y mucha creatividad.

Sin darme cuenta, ya llevo 3 formaciones en las que he volcado mi alma. Siempre es un forcejeo con el Ego, que muchas veces no quiere ser docente, profesora, maestra o guía ya que le aterra equivocarse. Sin embargo, mi alma, que se sabe guiada por Lo Más Grande, siempre ha salido como ganadora y aceptando el desafío.

Esta Formación es un acto creativo colaborativo que, como tal, está en constante crecimiento. Para esto, se requiere de los alumnos mucha pasión, curiosidad, tolerancia a los cambios y flexibilidad intencionada—o plasticidad—. Esto es especialmente importante en los tiempos actuales, que exigen adaptación a la incertidumbre y autocuidado en el relacionamiento físico.

Esta Formación será una aventura, un viaje. La experiencia me ha mostrado los caminos a seguir entre lo visible y lo invisible, entre lo cognitivo y lo artístico, entre el saber y la sabiduría. Esta experiencia permitirá que los alumnos transiten un espacio lleno de señaléticas que les ayudará a sostener lo difícil y lo que, en algún momento, no pudieron transitar solos. Podrán decodificar sus propios traumas e incorporarlos de manera amable y compasiva en el corazón.

Deseo e intenciono que esta Formación sea un viaje interior para encontrar el tesoro que está en cada persona para la autosanación y, desde ese lugar de empoderamiento y enriquecimiento, aprender las herramientas y recursos que los lleven a ser facilitadores, acompañantes de procesos de otros seres humanos.

¿Dónde está el foco de esta Formación?

El foco está en la Compasión y en el Amor compartido y solidario, en generar una experiencia grupal que deje huellas sanadoras y construya vínculos saludables para sanar experiencias difíciles de la vida.

Esta formación es una profunda invitación a vivenciar y experimentar el sonido del Amor Divino que hay en cada uno de nosotros, que sólo se logra en un espacio de contención, confianza y compasión amorosa.

Durante el tiempo que recorramos este camino juntos, iremos de la mano del trabajo somático y de las constelaciones familiares para entretejer una alianza terapéutica que sostiene el camino hacia la sanación e integración de las heridas de la vida.

El foco está en la Compasión y en el Amor compartido y solidario. El foco está en generar una experiencia grupal que deje huellas sanadoras y construya vínculos saludables para sanar experiencias difíciles de la vida.

Esta formación es una profunda invitación a vivenciar y experimentar el sonido del Amor Divino que hay en cada uno de nosotros, que sólo se logra en un espacio de contención, confianza y compasión amorosa.

Durante el tiempo que recorramos este camino juntos, iremos de la mano del trabajo somático y de las constelaciones familiares para entretejer una alianza terapéutica que sostiene el camino hacia la sanación e integración de las heridas de la vida.

Descargar aquí Programa Formación 2021-2022

Sobre Formaciones Pasadas

Llegar a puerto después de atravesar un mar tormentoso e impredecible requiere superar la incertidumbre y los miedos a través de un coraje ejemplar. Navegamos juntos un océano de traumas y desórdenes del amor escondidos en los sistemas familiares para sanar a nuestras niñas heridas y aprender a acompañarlas desde la sabiduría y la experiencia, tomando su mano en presencia y compasión.

La formación es un espacio acogedor y de contención como una base para que los aprendices puedan realizar sus viajes hacia el interior del corazón individual y familiar. Los ancestros entregan su amor y bendiciones y los estudiantes sienten la grandeza y sabiduría del Campo de información que nos regala lo más grande. Con esto podemos desanudar, destrabar, abrir, completar movimientos interrumpidos y religar lo que está separado. El amor siempre estuvo y está.

Salen de esta formación libres como colibríes, pero no deben olvidar que somos eternos aprendices. El Espíritu nos guía a todos y formamos una comunidad en que nos podremos acompañar en nuestros aciertos y desaciertos. Honramos a nuestros padres, a nuestro clan y llevamos la solidaridad en nuestra esencia para ser parte de este nuevo sistema.